La planificación estratégica es un proceso que ayuda a las organizaciones a establecer objetivos y crear un plan para alcanzarlos. Implica mirar el panorama general de la organización y considerar asuntos como el estado actual del negocio, las tendencias de la industria y el mercado, y las fortalezas y debilidades de la organización.
El proceso generalmente comienza con un análisis exhaustivo de la situación actual, que puede incluir estudios de mercado, datos financieros, drivers y desafíos clave.
Una vez hecho este análisis, la organización define sus metas y objetivos a largo plazo. Aquí es donde la organización decide hacia dónde quiere ir, qué quiere lograr y qué pasos debe seguir para llegar hasta allá.
A continuación, se desarrolla un plan para lograr estos objetivos. Este plan debe incluir objetivos específicos y medibles y un cronograma para alcanzarlos. También debe incluir detalles sobre cómo la organización asignará los recursos y monitoreará el avance.
Finalmente, la organización implementa el plan y hace un seguimiento del avance para garantizar que se cumplan los objetivos. Esto puede implicar revisiones periódicas y ajustes según fuera necesario.
En general, la planificación estratégica es un proceso que ayuda a las organizaciones a mantenerse enfocadas en sus objetivos, mantenerse competitivas y aprovechar al máximo sus recursos.